Cada vez son más las familias que optan por este tipo de oferta habitacional en regiones.

A la hora de optar por la compra de una vivienda son múltiples las variables que las personas ponderan para tomar una decisión. Algunos de estos aspectos responden a factores propios del grupo familiar, como cantidad de integrantes, dinámica laboral o de estudios, entre otros. Además se toman en cuenta atributos del proyecto inmobiliario en particular, como emplazamiento, entorno y conectividad.

De forma previa al análisis más específico, los compradores definen también -en función de sus características y necesidades- si lo que mejor se adecua a sus requerimientos es una casa o un departamento. Cada uno tiene sus ventajas y todo depende de lo que busquen sus futuros propietarios. En este caso te presentamos cuatro importantes beneficios de habitar en un departamento, tendencia que desde las grandes ciudades se ha extendido a comunas intermedias y a regiones, donde la oferta de este tipo de soluciones habitacionales ha ido creciendo sostenidamente.

1.- Seguridad

La seguridad es hoy en día un tema muy sensible para las familias, por lo que forma parte del mix de variables consideradas a la hora de comprar una vivienda. En este sentido los departamentos ofrecen buenas condiciones, ya que están inmersos en una comunidad mayor, por lo que existe más resguardo del inmueble, lo que se complementa con la existencia de cámaras de seguridad, acceso controlado, conserjería, nocheros y vigilantes.

2.- Ubicación

La oferta inmobiliaria de edificios de departamentos tiende a concentrarse en las zonas más céntricas de las ciudades, lo que permite buena conectividad y proximidad con comercios y servicios. Es el caso, por ejemplo, de Edificio Tricentenario de Quillota, que se emplaza a solo 2 cuadras de la plaza de armas de esta ciudad y muy cerca de tradicionales colegios.

3. «Amenities»

Poco a poco los edificios de departamentos han ido igualando algunas características que antes eran privilegio de las casas, como disponer de amplios espacios comunes para la vida social o las actividades recreativas. Hoy los edificios cuentan con una muy buena infraestructura de este tipo, conocida como «amenities», donde se incluyen salas de eventos, piscinas y gimnasios. En el caso de Edificio Tricentenario de Quillota cuenta con quincho y terrazas panorámicos; sala de cine, biblioteca y muchos atributos que complementan la amplitud de sus departamentos.

4. Mantención

Actualmente los edificios de departamentos incluyen un gran número de espacios comunes que requieren de mucha mantención, sin embargo, estos no suponen un esfuerzo adicional por parte de los residentes, ya que la administración se encarga de ello y se cobra mes a mes a través de los gastos comunes.